Los miembros de las bandas latinas se citan en bocas de metro y desde allí van a la caza de otros grupos rivales. En las últimas reyertas se han enfrentado Trinitarios con los Dominican Don't Play presentes en zonas como Lavapiés, Villaverde o Usera.
Entre ellos se llaman soldados. Sus armas son cuchillos y machetes. Y su objetivo hacerse con el control de los parques donde captan a muchos de sus miembros.
Los Dominican imponen su poder en zonas como la Deseha Boyal de Villavede. En ese distrito además controlan las pistas deportivas. También están presentes en Lavapiés o Vallecas.
Carabanchel no es territorio de nadie. Las dos grandes bandas luchan por el control del territorio. Cada grupo tiene su color, su estética. Para los Trinitarios, por ejemplo, es el verde.
Otro distrito en disputa es Usera donde algunas zonas están bajo control de Ñetas o Latin Kings. Bandas casi erradicados pero aún en activo.
En cambio, este lunes, en Telemadrid, el inspector de la Policía negaba que hubiese una "territorialidad" de estos grupos a semejanza de las bandas criminales de América Latina.