Llamadas a la calma tras los incidentes en Vallecas después de la muerte de Paco
Vecinos de Pozo del Tío Raimundo niegan que haya racismo en el barrio
Aseguran que los problemas de convivencia se deben al clan de 'Los Visita'
REDACCIÓN / AGENCIAS
Se refuerza la vigilancia policial en Vallecas. La tensión crece tras el enfrentamiento abierto entre los vecinos y el clan de 'Los Visita' por la muerte de un hombre el pasado domingo. Todo tras los graves altercados en la noche de este martes, en los que un camión perteneciente a este clan resultó calcinado y una furgoneta sufrió daños en sus lunas y neumáticos.
La Policía se ha reunido con los residentes en la zona para templar los ánimos, mientras que desde las asociaciones vecinales llaman a la calma en el barrio. Tanto el Ayuntamiento como las entidades se van a coordinar para parar este brote de violencia.
Unos 200 vecinos del Pozo del Tío Raimundo, en el madrileño distrito de Puente de Vallecas, protagonizaban el martes nuevas escenas de tensión en el barrio donde el domingo resultó muerto de una cuchillada en el cuello Paco, un hombre de 64 años. El autor de los hechos no ha sido aún detenido, aunque parte de los vecinos del barrio responsabilizan directamente a los miembros de un clan de etnia gitana, 'Los Visita', que viven en el barrio.
El martes, por segunda noche consecutiva, decenas de personas se concentraban en la calle Esteban Carros para clamar venganza y exigir a los supuestos autores del crimen y sus familias abandonar el barrio. Un grupo de personas se concentró en las proximidades de la vivienda protestando contra ellos.
Los momentos de tensión fueron en aumento hasta el punto de que la Policía Municipal solicitó a la Nacional su presencia, por lo que se desplegaron efectivos de la Unidad de Prevención Rápida (UPR) y de la Unidad de Intervención Policial (UIP), los antidisturbios.
Un camión de su propiedad aparcado en la calle resultó incendiado y una furgoneta recibió daños en sus lunas y neumáticos.
A las 22.00 horas, según fuentes policiales, la situación se controló y los concentrados abandonaron el lugar. La Policía mantiene vigilancia en el lugar.
La Fundación del Secretariado del Pueblo Gitano ha alertado este miércoles del "linchamiento" que están sufriendo familias de etnia gitana en Vallecas, tras el apuñalamiento de Paco en el Pozo del Tío Raimundo, y ha pedido "no generalizar".
Laly Camacho, técnica de igualdad de la Fundación del Secretariado Gitano, ha indicado que se han reunido tras el incidente con familias del barrio y han pedido que "se las proteja" ya que hay "150 menores que no pueden ir al colegio y están sufriendo un linchamiento" por motivos racistas, cuando estas familias "llevan 30 ó 40 años viviendo ahí y no tienen culpa". "Les han quemado furgonetas que es su herramienta de trabajo, no les atienden en las tiendas y los menores están atemorizados porque van al colegio y les llaman asesinos. Pedimos que se actúe de la mías manera que si la persona que ha cometido el delito no fuese gitana", ha solicitado.
Por su parte, la directora de la Fundación, Rocío García, ha señalado que este jueves se ha convocado una reunión en la que participarán entidades y asociaciones, vecinos y agentes del barrio con el Ayuntamiento con la idea de "tomar medidas que faciliten la convivencia y que no se generalice". "Lamentamos tremendamente cualquier tipo de acto delictivo y esperamos que la policía tome medidas para identificar a los posibles culpables pero que no se generalice al conjunto de familias que viven en el barrio", ha indicado.
Por el contrario, vecinos del barrio, entrevistados por Telemadrid, aseguran que "aquí no hay ningún problema de racismo, ni de gitanos, ni de nada. Tenemos vecinos divinos. El problema son ellos. Se apoderan de todo, los niños no pueden ir a comprar, si vas y les dices algo te quieren pegar".