Los paneles que informarán sobre el grado de ocupación de los aparcamientos en el interior de Madrid Central no se instalarán hasta, al menos, el próximo mes de agosto, pues el Ayuntamiento de Madrid suscribió el pasado 18 de marzo el contrato para su instalación, con un plazo de ejecución de seis meses.
Además, el Ayuntamiento da una moratoria hasta el 30 de junio a los repartidores con moto, los conocidos como 'riders', para que puedan entrar en Madrid Central hasta las doce de la noche.
Así lo ha detallado el director general de Gestión y Vigilancia de la Circulación del Consistorio madrileño, Francisco José López Carmona, en la comisión municipal de Medio Ambiente y Movilidad ante una pregunta del Partido Popular.
En líneas generales, a este área de 472 hectáreas en el centro de la capital sólo pueden acceder los residentes, los vehículos con etiqueta ambiental ECO y Cero Emisiones y los que tengan distintivo B y C siempre que acudan a un aparcamiento.
Críticas del PP
El edil del PP Luis Miguel Boto ha asegurado que sin estos paneles los conductores con vehículos de etiquetas B y C que accedan a Madrid Central se enfrentan a una multa si después no encuentran hueco en los aparcamientos, por lo que ha criticado la "desinformación".
En cambio, López Carmona ha subrayado que cuando funcionaban las áreas de prioridad residencial ahora contenidas en las APR regía la misma norma, solo se podía acceder sin ser residente para acudir a un aparcamiento, y nunca existieron pantallas informativas. En Madrid Central, una zona única, los aparcamientos son "numerosísimos", ha añadido el director general. Además, Madrid cuenta con una aplicación móvil gratuita y gestionada por la EMT en la que se informa sobre el grado de ocupación de cada aparcamientos, ha añadido López Carmona.
Ante las acusaciones del PP sobre un incremento en el tráfico perimetral, López Carmona ha asegurado que el tráfico en los bulevares ha descendido "por encima del 3%", mientras que en los aparcamientos municipales la ocupación solo ha descendido en un 7% respecto a febrero de 2018.
Desde el pasado sábado, 16 de marzo, acceder indebidamente a Madrid Central conlleva una multa de 90 euros, 45 con pronto pago.