El Gobierno espera que el impuesto al diésel sea una de las principales fuentes de recaudación, según la subida que contempla en los Presupuestos Generales de Estado. Estima que con él va a ingresar 670 millones de euros, más del doble que lo previsto por la subida del IRPF.
Este impuesto va a afectar directamente a todos los conductores que tengan un vehículo diésel. La idea del Gobierno es equiparar la fiscalidad del diésel y la gasolina.
El litro de diésel tiene actualmente un 48% de impuestos mientras que el de gasolina un 52%. Con los Presupuestos acordados por el PSOE y Podemos se subirá el tipo estatal general del diésel hasta igualarlo.
Traducido en lo que va a costar al bolsillo a cada ciudadano que tenga un vehículo diésel, resulta que llenar un depósito medio se encarecerá 2,15 euros.
Aumento sustancial
Sobre el aumento de la fiscalidad al diésel, la patronal CEOE destaca que las estimaciones anteriores suponían un aumento de recaudación de 400 millones de euros, mientras ahora han pasado a ser de 670 millones.
Para la CEOE, "la política presupuestaria es expansiva en gastos sociales, elude prácticamente cualquier referencia al gasto destinado a políticas sectoriales y de inversiones e irá acompañada de una subida de impuestos, sobre todo al sector empresarial".