La inflamación ha provocado que el precio de la caña de cerveza haya subido respecto a la época pre-pandemia. La cerveza de barril, que engloba rubias, Premium y sin, ha subido un 14% su precio, la doble un 12%, la caña un 7%, mientras que el botellín un 6%.
Popularmente los españoles acudían al bar a pedirse una caña, pero ahora prefieren pedirse una doble, que trae más cantidad a un precio mucho más económico a la tradicional caña.
Sin embargo, este hábito se empezó a instaurar justo después de la reapertura de la hostelería durante la pandemia, cuando solo servían dobles en las terrazas. Lo que no ha cambiado es su consumo, que sigue siendo el preferido por los españoles, especialmente en la época de verano.