Las vacunas ARN Mensajero utilizadas para combatir la Covid, abren otras líneas de investigación en la lucha contra distintas enfermedades graves como la malaria, la tuberculosis o el herpes genital.
Es uno de los grandes avances científicos, según apunta la revista Nature, que se lograrán en 2023.
Incluso, se ensaya un tratamiento con esta vacuna que reduciría en más de un 40% el riesgo de recaída o muerte por melanoma.
También, en este año nuevo, otro tratamiento podría ser fundamental contra una enfermedad cada vez más extendida; el alzheimer.
Estados Unidos anunciará muy pronto la regulación del fármaco Lecanemab. En su ensayo clinico, logró frenar un 27% el deterioro mental en pacientes en fases iniciales.
Otro tratamiento, aún muy limitado, que podría llegar en 2023 es el de la terapia de edición de genes. Un corta y pega para alterar una cadena de ADN y reemplazar los genes dañados.
De momento, sólo hay resultados en las pruebas clínicas de dos trastornos genéticos de la sangre. Aún así, salvaguardando la parte ética, la ingeniería genética avanza hacia un futuro cada vez más cercano
Sin embargo, es sólo un inicio. En la llamada ingeniería genética aún queda mucha investigación por delante.