El pollo podría convertirse en un producto de lujo. El kilo de pechuga podría alcanzar entre 15 y 20 euros, llegando a triplicar su precio actual.
Es la denuncia de la asociación de productores de carne avícola ante la nueva Ley de Bienestar Animal que prepara la Unión Europea.
Aseguran que supondría un aumento de costes y el cierre de más de 2.000 granjas al no poder adaptarse a la nueva normativa.
Eliminar las jaulas o ampliar el espacio del que disponen los animales son algunas de las medias que implementaría esta nueva regulación.