El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha aprovechado hoy su intervención en el Congreso de los Diputados para atacar a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Se producía a cuenta de las conversaciones de la Comunidad para tantear la compra de Sputnik, la vacuna rusa.
Durante su turno de réplica en el Parlamento, donde ha acudido a presentar el Plan de Recuperación, Pedro Sánchez ha aprovechado para meter en el debate la campaña electoral de los comicios regionales de Madrid del 4 de mayo. Y lo ha hecho en varias ocasiones.
"Es cierto que estamos viendo que alguna Comunidad Autónoma que negocia por su cuenta para comprar la Sputnik", ha señalado Pedro Sánchez sin mencionar expresamente a la comunidad de Madrid, pero sí apuntando que esa autonomía tiene la sede "a unos metros" del Parlamento, en la Puerta del Sol. Y ha ironizado asegurando que se van a independizar de la Agencia Europea del Medicamento (EMA): "dentro de poco va a declarar la independencia de la Agencia Europea del Medicamento alguna autonomía y no es, por cierto, la catalana".
El jefe del Ejecutivo también ha insinuado que el Gobierno regional tiene la culpa de que haya aumentado en Madrid el número de personas que rechazan la vacuna de AstraZéneca, mucho mayor que en otros territorios. "Será porque no hay un compromiso claro e inequívoco de las instituciones" regionales, ha remachado.
En este sentido, ha pedido que no se contribuya a que haya "desinformación", sino que se traslade "seguridad y garantías" a los ciudadanos. "Seamos serios y critiquen lo que hagamos mal, pero no aquello que hacemos con total garantía para administrar la vacuna con total seguridad", ha reclamado tras explicar que el Gobierno ha ido dando pasos con la vacuna AstraZéneca en función de lo que recomendaba la ciencia.
Previamente, Sánchez había provechado para cargar contra el presidente del PP, Pablo Casado, al que le ha acusado de estar demasiado "gritón" demostrando así que está "inquieto" y atribuyéndolo a que no le dejan participar en la campaña electoral madrileña. "Veo que está impaciente por entrar en la campaña de Madrid, pero me pregunto, ¿será que no le dejan?", ha asegurado Sánchez. Y le ha espetado: "el señor Abascal fue a Vallecas a montar bronca y usted viene a la Carrera de San Jerónimo a montar bronca". Pero ha afirmado que él no va a entrar en ello.
Pero Pedro Sánchez no se ha limitado a traer a colación la campaña madrileña en la respuesta a Pablo Casado, también lo ha hecho cuando respondía a la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, a la que ha acusado de tener "síndrome de Estocolmo" por anunciar que volverían a pactar con el PP en Madrid para gobernar. "El PP rompe con ustedes, les roba los tránsfugas, los cargos del partido y usted, por boca de su candidato, tiene la propuesta de volver a reeditar el pacto en la Comunidad de Madrid", ha exclamado, después de recordar a la líder naranja, quien se había quejado de que el Gobierno no diera ayudas directas a la hostelería, que han sido las comunidades gobernadas por el PSOE quienes lo han hecho, mientras que Ciudadanos formaba parte de un Gobierno regional --el de Madrid-- que "no ha dado ni una ayuda directa al sector".
El jefe del Ejecutivo también ha incluido la campaña madrileña al acusar al líder de Vox, Santiago Abascal, de haber "tenido que ir a un barrio de Madrid para reivindicar que existe" porque, según ha dicho, no tenían bastante con "el odio y la furia".
Sánchez ha asegurado que condena la violencia, "incluso la que ustedes han sufrido", ha espetado en referencia a la vivida por los dirigentes de Vox la semana pasada en el barrio madrileño de Vallecas. "No creemos en el conflicto, también descalificamos la violencia que Vox haya sufrido", ha insistido Sánchez, para acusar al partido de Abascal de ser el mismo que "llama a sus militantes a tomar las calles, el mismo partido, el suyo, que llama al Ejército a dar un golpe de Estado como han hecho".