Comparecencia del Presidente del Gobierno en el Congreso de los Diputados, dos meses después de que se decretara el nuevo Estado de Alarma. Dice Sánchez que funciona, que estamos en el principio del fin, pero que no hay que bajar la guardia. Pedro Sánchez sin embargo ha tenido que volver a escuchar los reproches de la Oposición.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acusó este miércoles al líder del Partido Popular, Pablo Casado, de practicar un “extremismo absurdo y acomplejado” fruto de unas “perspectivas electorales mediocres”, y le pidió que deje su “agenda lunática”.
Sánchez afeó a Casado su actitud y que siga “equivocándose de enemigo” porque “no es el Gobierno” ni su persona, sino “el virus” que ha generado la mayor pandemia en los últimos 100 años. “La realidad de España va por un lado y ustedes por otro, ese es el problema”, trasladó el presidente a Casado.
Casado ha utilizado su intervención para reprocharle al Presidente que acuda al Congreso a "presumir" de la gestión de la crisis cuando en la última jornada han fallecido 388 personas. Dicho esto, le ha emplazado a disculparse ante los españoles. "Baje usted del Falcon, toque tierra, mire a los ojos a los médicos, a las familias, a los españoles, a los parados, a los jóvenes emigrados y dígales dos palabras: gracias por lo que han hecho y perdón porque presido un Gobierno que es incompetente, ha mentido y que además es tan arrogante de no reconocer el daño infligido en la sociedad", ha proclamado.
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha pedido al presidente del Gobierno que convoque elecciones anticipadas para "ahorrar" a los españoles sus "delirios, torpeza y sectarismo". "Váyanse porque el daño que están infringiendo cada día desde ese banco azul que ocupan, al que llegó cabalgando en la mentira, crece en miseria, desesperanza y enfermedad", ha reclamado.
La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, cree que es temerario por parte de Pedro Sánchez dar "una falsa sensación de seguridad" sobre la evolución de la covid a las puertas de la Navidad, con 388 fallecidos este martes, y le ha acusado de "abrir la mano" de cara a las fiestas. Por ello le ha pedido "un poquito más de prudencia" al presidente del Gobierno, y ha dicho sentir una cierta "envidia sana" al escuchar como otros líderes europeos, Angela Merkel o Emmanuel Macron, han hablado con claridad de los riesgos que existen todavía.
Desde Unidas Podemos, sus socios de Gobierno, presionan. Su portavoz en el Congreso, Pablo Echenique, recuerda a Sánchez, que "tiene la obligación histórica de ser valientes" para cumplir su agenda social, pues es la "mejor manera" de mandar al "basurero" a la "ultraderecha" y a los que "odian a media España" y dice que el reto ahora es subir el salario mínimo, paralizar desahucios y el corte de suministros.
Desde ERC, su portavoz Gabriel Rufián advierte al Gobierno de que no debe gobernar "por negación" o a través de la suma de "espantados por la alternativa, el golpismo y el fascismo" y aconseja no subestimar el fascismo subrayando que los exmilitares que critican al Gobierno no son sólo "cuatro fachas locos", sino que los golpistas están en el Poder Judicial, singularmente en el Tribunal Supremo, y en los medios de comunicación.
El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, abogaba por transmitir “tranquilidad” a la opinión pública porque “se están haciendo las cosas razonablemente bien” frente a la pandemia del coronavirus aunque criticó este tipo de debates en el que el Presidente informó sobre las últimas reuniones del Consejo Europeo y rendió cuentas sobre el estado de alarma vigente. “¡Vaya porrusalda de debate!”, comentó Esteban.