El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el primer ministro portugués, António Costa, iniciaron este viernes la 33 cumbre bilateral con un acto en el centro de Viana do Castelo y un paseo por las calles de esta localidad lusa.
Sánchez y Costa realizaron de forma previa al inicio de la cumbre una visita al Laboratorio Ibérico de Nanotecnología, ubicado en Braga, donde recorrieron sus instalaciones y conversaron con los trabajadores del centro.
Esta visita quiso simbolizar la apuesta de los dos países por la innovación, un asunto central en la reunión de este año entre los gobiernos de España y Portugal.
Desde Braga, donde estuvieron acompañados por sus respectivos ministros de Ciencia, Sánchez y Costa se desplazaron a Viana do Castelo, donde aguardaban ya el resto de sus respectivas delegaciones para comenzar la cumbre.
El evento se inició con un acto de bienvenida con honores militares en la Plaza de la República durante el que se interpretaron los himnos nacionales de ambos países y los dos jefes de Gobierno pasaron revista a las tropas.
Fue a continuación cuando Sánchez y Costa dieron un paseo por el centro de la ciudad durante el que saludaron a numerosas personas que se habían congregado en las calles y visitaron el Museo del Traje.
A las puertas de este edificio conversaron con varias autoridades locales y con el presidente de la Federación Española de Municipios (FEMP) y alcalde de Vigo, Abel Caballero.
En el recorrido posterior entraron en varios comercios, entre ellos una pastelería especializada en dulces típicos de la zona, y se fotografiaron con dos jóvenes ataviadas con el traje regional de Viana do Castelo antes de trasladarse a la Pousada de esta localidad portuguesa, el edificio en el que se desarrolla la cumbre.
En ella, España y Portugal pretenden reforzar su alianza para presionar a la Unión Europea a que tome ya decisiones en materia energética como la reforma del mercado eléctrico y el impulso de las interconexiones.