Decenas de personas se han manifestado esta mañana frente al Congreso para expresar su rechazo a la investidura de Pedro Sánchez. A la llegada de los primeros manifestantes se ha vivido un momento de tensión ante las vallas que ha instalado la policía en Neptuno. Un grupo había intentado colocar una bandera constitucional sobre otra preconstitucional para ocultarla y en ese momento comenzó una discusión.
El Congreso está blindado por 1.600 agentes de policía. Es uno de los mayores dispositivos de seguridad desplegados en un acto público. En todas estas calles aledañas a la Cámara Baja está prohibida la circulación de los peatones. Un perímetro vallado impide el paso.
Todas las calles alrededor del Congreso están cerradas. No pasan ni los turistas, ni trabajadores, ni carritos de bebé. Los huéspedes del Hotel Palace llegan al hotel andando y cargando sus maletas.