Cualquier enfermedad es dura, pero cuando afecta a un niño se clava en el alma porque ver sufrir a un niño es algo a lo que nadie se acostumbra. En el Día Mundial contra el Cáncer Infantil lejos de recrearnos en la cruz de la enfermedad, queremos lanzar un mensaje de optimismo.
Cada año 1.500 menores reciben el diagnóstico más temido, pero cada vez se curan más como es el caso de Lucia y su madre no puede estar más feliz. En esta celebración agradecemos enormemente la presencia en plató de Adela González querida compañera de Telemadrid presentadora de La Redacción, ella sabe muy bien la dureza de esta enfermedad y nos ayuda a entender un poco mejor lo que supone este día para los niños enfermos y sus familias.
“Quienes están en esta batalla saben muy bien lo duro que es –dice González- pero tienen que saber que cada día es un día ganado, es duro ir con los niños a hacer las revisiones, estar pendientes de las analíticas, pero la esperanza está ahí, es una lucha que va día a día y se puede ganar esa lucha”.
González agradece el trato y la buena relación con los médicos y con el personal sanitario en general cuando toca afrontar una enfermedad tan dura “porque al final pasas mucho tiempo en el hospital hasta que toca la campana que es cuando lo has superado y te despide el personal sanitario, es un momento muy emocionante”.
Tratamiento pionero en el Niño Jesús
Y efectivamente la enfermedad se puede vencer, como en el caso de Lucia que ha superado la leucemia gracias a un tratamiento pionero en el Hospital Niño Jesús.
Agradecidos e ilusionados. Así están los padres de la pequeña Lucía. El año pasado diagnosticaron a su hija una leucemia especialmente agresiva. Gracias a un nuevo tratamiento experimental, la niña se ha curado del cáncer.
América Luna, madre de Lucía, explica que “estuvimos nueve días en la UCI y luego ya a planta hasta que ya nos dieron el alta y fenomenal”. Han sido meses de lucha y angustia para sus padres. “Los medicamentos no le hacían nada, nunca le bajaba”, dice el Javier López de Hontanar, el padre de Lucía.
Apoyo del personal sanitario
En todo momento contaron con el apoyo de los médicos y personal de enfermería del Hospital Niño Jesús. Tratar a niños con cáncer requiere de una especial vocación. “Es una patología especial que requiere mucho cuidado y una responsabilidad de enfermería total. Ellos necesitan espacio y estar tranquilos, pero hay momentos en que descargan todas sus emociones en el personal de enfermería”, señala Pilar Herreros, supervisora de Oncología del Hospital Niño Jesús.
Para la pequeña Lucía y sus padres se abre ahora una nueva etapa de esperanza y, por fin, comienzan a respirar tranquilos.
Medicamentos personalizados contra el cáncer
En el Hospital Niño Jesús “fabricamos medicamentos utilizando como base las células de los pacientes o de donantes sanos”, explica Gustavo Melen, responsable técnico de la ‘sala blanca’ donde se investigan estos medicamentos y que es referente mundial en medicamentos contra el cáncer infantil
En la terapia avanzada parte de las células del sistema inmunitario se modifican para destruir las células cancerígenas. Cada tratamiento cuesta 350.000 euros y necesita la autorización del Ministerio de Sanidad. En apenas ocho meses ha demostrado su eficacia contra el cáncer infantil. De ocho niños tratados, seis se han curado”.
Pero sólo es el principio. “La tecnología se va a desarrollas de manera que se pueda fabricar este medicamento para cualquier cáncer”, dice Manuel Ramírez, responsable de terapias avanzadas del Hospital Niño Jesús.
También se trabaja en la llamada medicina personalizada con genes, fármacos especializados como dianas terapéuticas que contrarrestan la alteración genómica del paciente sin necesidad de utilizar quimioterapia, según señala Luis Madero, jefe del Servicio de Oncología del Niño Jesús.