Esta tarde se inaugura el tramo de Alta Velocidad en Extremadura, entre Plasencia y Badajoz. El acto lo presidirá el Rey y hasta allí se desplazará también Pedro Sánchez. La polémica ha rodeado a este acto. El tren "de altas prestaciones" según el gobierno que va a realizar ese trayecto no alcanzará los 100 kilómetros por hora, algo que queda muy por debajo de la velocidad en otras líneas del AVE en España.
De un día para otro dos invitaciones distintas para un mismo acto. En la primera se hable de “inauguración del AVE en Extremadura”. La segunda de inauguración de la “primera fase de la alta velocidad en Extremadura”. La polémica está servida.
Y es que el tren que inaugura esta tarde el Rey no será un AVE, sino un Alvia. Puede alcanzar los 250 kms por hora, pero como la plataforma todavía no está electrificada, circulará en modo diésel. La velocidad media será de 89 kms por hora. Lo llaman de “altas prestaciones”. En principio, no será hasta 2023 cuando toda la vía se electrifique.
Se han invertido 1.700 millones de euros en la infraestructura ferroviaria de alta velocidad en tierras extremeñas, con una longitud de casi 150 kilómetros.
La línea entra en servicio en ancho convencional y para tráfico mixto, esto es, para trenes de viajeros y de mercancías, con traviesas polivalentes.
Después de 22 años del anuncio de que el AVE llegaría a Extremadura, colectivos y oposición lo consideran un timo.
El trayecto total Madrid-Badajoz durara 4 horas y 17 minutos, con un ahorro de tiempo de 51 minutos pero nada que ver con las 2 horas 37 minutos a Sevilla, o dos horas y media de llegada a Barcelona.