Por orden de la Consejería de Educación, este mes de abril todos los colegios e institutos de la Comunidad, financiados con fondos públicos, tendrán que hacer pública su programación para el próximo curso.
Desde el gobierno regional niegan que esto sea un "pin parental" aseguran que con esta instrucción se da cumplimiento a su compromiso escrito con Vox en favor de la transparencia.
Desde el partido de Abascal se ha emitido un comunicado en el que insisten en que nadie del gobierno se ha puesto en contacto con la portavoz del grupo, Rocío Monasterio, y recuerdan que el pin parental sigue siendo una exigencia para la negociación de los presupuestos.
Desde la izquierda madrileña Unidas Podemos no tiene duda, y en palabras del portavoz Jacinto Morano, afirman que; "si no es un pin parental, es un puk parental, porque son muy parecidos". Lo que está claro es que desde el gobierno se responde a las exigencias de Vox.
El PSOE asegura que estos datos ya estaban a disposición de los padres y habla de cortina de humo. Además, exigen a la presidenta regional un compromiso con la educación pública.
Por su parte, Ciudadanos se ha preferido mantenerse al margen de esta polémica, y hoy, a pesar de la petición de Telemadrid, han optado por no hablar.
Los que si hablan son los padres, para quienes las posiciones están divididas.
En abril los padres y madres madrileñas conocerán la programación escolar de los centros donde quieran matricular a sus hijos, una programación que incluye las actividades complementarias y las extraescolares.