Imparables, por ahora, los incendios que afectan a Grecia y Turquía. Las altas temperaturas y el viento complican su extinción. En Turquía, ya son 10 días luchando contra las llamas. En Grecia, hay más de un centenar de fuegos activos.
Llamas de más de 30 metros, un muro de fuego que arrasa miles de hectáreas y decenas de unidades de bomberos y militares desbordados por los focos.
Grecia continúa este viernes luchando con todos sus medios contra unos incendios que no logran ser controlados. El fuerte viento y el calor han reavivado la noche del jueves muchos de los frentes que se creían bajo control.
La policía helena va casa por casa pidiendo a los vecinos que cumplan las órdenes de evacuación ante el avance de las llamas. El primer ministro griego, Kiriakos Misotakis, en un mensaje dirigido a la nación, habla de una situación "sin precedentes" y de un país convertido en "un polvorín" en medio de una labor casi imposible.
En el norte de Atenas, 2.000 refugiados del campo de Malakasa han sido evacuados y el antiguo Palacio de la familia real griega se ha salvado de momento de unos incendios que afectan ya al bosque que los rodea.
Mientras, en Turquía, se lucha por décimo día consecutivo contra los incendios de su costa sur, que ha dejado hasta el momento 8 fallecidos.