Las pensiones volverán a subir con el IPC. Es la intención del Gobierno siempre y cuando consiga sacar adelante los Presupuestos que presentará en enero. El Banco de España ya ha alertado de que volver a vincular las pensiones a la inflación tendrá un coste adicional de más de 5.000 millones de euros.
Compensar las pensiones
Era una medida que los mayores esperaban como agua de mayo y que se anunciaba este lunes. El Gobierno quiere compensar las pensiones en 2018 con la inflación de noviembre, con lo que tendrá que abonar a los pensionistas la décima de diferencia entre la revalorización de las pensiones presupuestada (1,6%) y la tasa anual de IPC del mes pasado (1,7%).
Así pues, y si se aprueban los Presupuestos, las pensiones se van a revalorizar conforme al IPC previsto, un 1,6% de manera general, lo que traducido en euros supondrá un gasto extra de 5.300 millones para 2019, según explica a Telemadrid el catedrático de Economía, Rafael Pampillón
La sostenibilidad
El Banco de España critica que se atrase la entrada en vigor del factor de sostenibilidad hasta 2023, mientras que los pensionistas aplauden la subida, aunque con matices. Los expertos, por su parte, abogan por aumentar la edad de jubilación e incrementar la productividad para que se reduzca el número de pensiones.
Fuentes gubernamentales han explicado que se ha optado por hacerlo así porque en diciembre es posible que la inflación no supere el 1,6 %, con lo que los pensionistas se quedarían sin compensación.