Entrar en un quirófano para ser operado nos da miedo a los mayores, pues imagínense cómo se sienten los más pequeños. Para reducir ese miedo y esa inseguridad, un hospital utiliza ya con los niños un coche teledirigido que ellos mismo conducen hasta la sala de operaciones. Desde que lo utilizan entran más contentos y los padres esperan más tranquilos.
El hospital IMQ Zorrotzaurre de Bilbao ha puesto en marcha esta iniciativa que, permite que los niños entren en el quirófano subido en un coche eléctrico, dirigido por un celador por control remoto.
Según señalan en el hospital, con esta iniciativa se reduce el estrés y los llantos de unos niños que entran a un quirófano donde no saben que se le va a hacer".
Además es bueno también para su recuperación, porque cuanto más tranquilo se duerma el pequeño menos agitado se despertará de la anestesia.