La redada llevada a cabo este miércoles en Plaza Elíptica para combatir la explotación laboral ha reducido pero no ha cortado la afluencia de personas en paro, la mayoría inmigrantes irregulares, que buscan un poco de dinero por un día de trabajo físico.
Se trata de uno de los puntos negros de explotación laboral y contratación irregular de trabajadores en Madrid. Cada mañana, decenas de inmigrantes irregulares se agolpan allí en busca de algún empleo ocasional. Sin contrato, sin seguro y a cambio de unos pocos euros, a menudo, a cambio de jornadas superiores a las ocho horas.
Agentes de Brigada de Extranjería de la Policía Nacional de Madrid y de la Policía Municipal y efectivos de Inspección de Trabajo ejecutaron este miércoles una operación contra la explotación laboral de trabajadores en la Plaza Elíptica y otros puntos de la capital y la región, según confirmaron fuentes policiales. El objetivo castigar el abuso de algunos contratistas y particulares.