Los vecinos de Lavapiés denuncian la progresiva degradación de sus calles. El considerado como el barrio más 'cool' del mundo ofrece otra cara mucho menos amable para sus habitantes. Al problema de la suciedad creciente se une ahora, según los vecinos, el de la heroína. Denuncian que ha vuelto a sus calles, que el consumo de droga es visible y no solo en los narcopisos.
Según la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción el consumo de heroína se mantiene estable en España y no baja en Madrid. Para algunos vecinos las imágenes del día a día les recuerdan tiempos pasados: los años 80. Según el sindicato de policía municipal CSIT las incautaciones de droga en Lavapiés se han incrementado hasta un 500 por ciento en el último año.