En el mismo instante en que ‘los Visita’ ponen un pie en el barrio del Pozo del Tío Raimundo, los vecinos se echan a la calle. Les gritan que no vuelvan nunca. Las dos familias más cercanas al presunto asesino responden y dicen que sólo vuelven a por algunos enseres.
Pero de poco sirven las palabras del tío del 'Chule'. La tensión aumenta, además de la Policía Municipal, agentes de las UIP cercan la zona, y el concejal del distrito intenta mediar. Los vecinos quieren que se vayan para siempre.
Esta mañana de miércoles continúa la vigilancia en el barrio. Prueba de que el conflicto no ha terminado y las concentraciones se seguirán sucediendo, todas las tardes, hasta que los vecinos sepan a ciencia cierta que ‘los Visita’ se han marchado.