El virus ya ha llegado a todas las provincias de China, después de que el Tíbet, última región hasta ahora libre de contagio, haya confirmado su primer caso. Las cifras oficiales ascienden a 170 muertos y superan los 7.700 infectados pero hay sospechas de contagio sobre 12.000 personas más.
Sin embargo las autoridades chinas son optimistas y dan por hecho que la expansión está contenida. El Director del Centro de Control de Enfermedades afirmaba que "El número de casos confirmados a nivel nacional supera los 7.700.
El número de casos confirmados fuera de China es de 68. En otras palabras, los casos fuera de China no llegan al 1% del total.
Eso significa que somos efectivos controlando la salida del virus" Pero el miedo a escala global aumenta, Rusia ha cerrado su frontera con China y ha suspendido la entrega de visados electrónicos a ciudadanos chinos.