Con las reuniones navideñas a la vuelta de la esquina, muchos españoles ya tienen claro qué temas es mejor evitar para garantizar la armonía en la mesa.
Las encuestas indican que seis de cada diez se sienten incómodos cuando las conversaciones giran en torno a la política, especialmente si surgen diferencias de opinión. "Política no se debe hablar, por si alguien opina contrario", apunta una de las opiniones recogidas, mientras otra señala que "como sea uno de derecha y otro de izquierdas" las tensiones están aseguradas.
Pero los temas conflictivos no acaban ahí. Las preguntas personales también generan incomodidad, como indagar sobre la vida sentimental o la planificación familiar. "Cuando te has echado pareja... cuándo viene el siguiente... están todos deseando descendientes, me hago la loca", comentan otros entrevistados.
Los comentarios relacionados con el peso también pueden ser motivo de malestar y es recomendable evitarlos.
En definitiva, para disfrutar de unas fiestas en paz, los expertos recomiendan optar por conversaciones ligeras y sin trascendencia, como temas de ascensor, contar chistes o incluso proponer juegos en grupo.