El Congreso tumba la reforma de la Ley de Extranjería para repartir menores migrantes
PP, Vox y Junts han votado en contra y UPN se ha abstenido
La reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería buscaba repartir de forma obligatoria menores migrantes no acompañados de territorios con una sobreocupación del 150%
REDACCIÓN / EUROPA PRESS
El Congreso de los Diputados ha tumbado este martes la reforma de la Ley de Extranjería, que ha contado con el rechazo de PP, Vox y Junts. En concreto, se han registrado 349 votos, 171 a favor, 177 en contra (PP, Junts y Vox) y una abstención, de UPN.
La proposición de ley fue registrada la semana pasada por el PSOE, Sumar y Coalición Canaria en el Congreso de los Diputados. La reforma del artículo 35 de la Ley de Extranjería buscaba repartir de forma obligatoria menores migrantes no acompañados de territorios con una sobreocupación del 150%.
En el debate previo a la votación de la toma en consideración de la iniciativa, la diputada del PP Ana Alós pidió al PSOE que retirasen la proposición y se remitió a las exigencias de los 'populares'. "Retiren esta proposición de ley. Póngase de verdad a negociar si tienen voluntad para ello, convoquen una Conferencia de Presidentes de forma inmediata y convoquen también un pleno extraordinario monográfico para debatir sobre migración y les puedo asegurar que van a tener soluciones para este problema que sufre Canarias y todo el resto de España", aseguró.
Por el PSOE, el socialista Luc André Diouf, destacó que Canarias y los niños menores migrantes no acompañados "están agotados" y que, "no hay excusas", ni "más tiempo". "Señorías del Partido Popular, se trata de las niñas y de los niños, no de ustedes", afirmó.
Por su parte, el diputado de Sumar Nahuel González, instó al Partido Popular y Junts a que reconsiderasen su postura. En este sentido, añadió que estos grupos "se han unido con la ultraderecha para impedir que esta Cámara pueda decidir y trabajar sobre una cuestión tan importante como es la gestión solidaria y humanitaria de niños y niñas que abandonan sus países en busca de una vida normal". Así, explicó que "todavía hay tiempo" para que la iniciativa pueda ser tramitada. "Apelamos a la humanidad, apelamos al sentimiento más básico en nosotras y nosotros, la empatía y la altura de miras para que podamos tratar una cuestión tan importante de este país", agregó.
Por su parte, la diputada por Coalición Canaria, Cristina Valido, se mostró partidaria de retirar la reforma de la Ley de Extranjería si no se lograba un acuerdo para que saliese adelante. "Si en las próximas horas no hay un acuerdo, pediré que no se vote, que se quede sobre la mesa y que sigamos hablando", advirtió. Además, Valido reclamó construir "la política migratoria que responda a la nueva realidad, a las nuevas migraciones" y añadió que "el consenso no sigue con discursos y mensajes de ofensa, de insulto, de señalación". Por ello, recalcó que los grupos tienen "relatos y discursos de sobra para desgastarse, para crujirse unos a otros". "No usen a los menores", subrayó.
Por Podemos, Noemí Santana, indicó que el texto de la reforma tiene "muchísimas deficiencias" y que se ha de mejorar a través de enmiendas. Además, dijo que, desde su formación, no entienden que el Partido Socialista haya buscado, hasta último momento, los apoyos en el Partido Popular, "que ha asumido los discursos racistas y xenófobos de la ultraderecha".
Mientras, el diputado de Unión del Pueblo Navarro (UPN) Alberto Catalán indicó que solidaridad "sí, pero ha dicho que "responsabilidad" por parte del Ejecutivo también. En este sentido, añadió que "el enfrentamiento no aporta nada positivo y es evidente que algo está fallando en la política migratoria de este Gobierno". "La cuestión no se resuelve desde la imposición, sino desde el diálogo, desde el consenso, desde el acuerdo", apuntó.
JUNTS: "NO DA TRANQUILIDAD, NI SEGURIDAD"
Junts también pidió en el debate que se retirase la ley y se trabaje en un acuerdo. En este sentido, la diputada Miriam Nogueras dijo que la ley no da "tranquilidad, ni da seguridad, ni a unos ni a otros" y agregó que aprobarla es "engañarse". "Quizás les dará muchos titulares populistas, pero no arreglará el problema", indicó. Además, acusó al Gobierno de "abusar" de la solidaridad del pueblo de Cataluña. "Con esta ley ustedes no garantizan una vida digna y en condiciones. Y eso a quien está dando alas es a ellos, a la derecha y a la ultraderecha", explicó.
En la misma línea se mostró Vox, que señaló que su "solidaridad" es con sus hijos, con los vecinos donde se encuentran los centros para menores migrantes no acompañados y con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. "Si quieren acabar con el efecto llamada, solo hay una solución, que es cumplir la ley", matizó. Por su parte, el diputado de Esquerra Republicana de Catalunya, Jordi Salvador explicó que su grupo considera "imprescindible" abordar la situación de la arribada de los menores de edad que llegan a España.
En todo caso, destacó que hay que definir el concepto de sobreocupación, que la Administración del Estado haga las gestiones "necesarias" para garantizar que las personas que se deriven sean efectivamente menores de edad y abordar el financiamiento de las políticas de acogida. Además, avisó de que su voto final, si se toma en consideración, dependerá de la aceptación durante el trámite parlamentario de los temas expuestos.
Maribel Vaquero, por el PNV, aseguró durante su intervención que la reforma "no deja de ser un parche necesario y urgente", pero incidió en que "el Gobierno está perdiendo una oportunidad para afrontar el reto de la migración de una forma responsable, un desafío a abordar desde una perspectiva integral y multidisciplinar y que no solo afecta a menores".
Finalmente, EH Bildu señaló que ven la proposición de ley "de sentido común" y "lógica" y que, por ello, apoyarían su toma en consideración.