El rey Felipe VI ha destacado este martes la importancia de las relaciones de España con el Mediterráneo y el Magreb, una región “prioritaria” y en la que, aparte de en la Unión Europea, “están las bases de nuestra prosperidad y seguridad”, ha dicho.
Por eso ha señalado la importancia de tener una relación con los vecinos del sur que esté “basada en los principios de respeto mutuo y de respeto de nuestras respectivas esferas de soberanía, de cumplimiento de los acuerdos y de genuina cooperación”.
El rey ha hecho estas afirmaciones en su intervención de clausura de la VII Conferencia de Embajadores en la que ha repasado los grandes retos y desafíos a los que se enfrenta España y animado a los diplomáticos en su labor de representación y defensa de los intereses de España.
Para don Felipe, los retos de los últimos años como la pandemia y la guerra de Ucrania han puesto de manifiesto la importancia de actuar unidos con nuestros socios, tanto de la Unión Europea como de la Alianza Atlántica. “España, coherente y constante en su defensa del principio de soberanía e integridad territorial de los Estados” ha materializado su ayuda y apoyo a Ucrania en todos los ámbitos y de forma coordinada con sus socios.
La reacción europea a la agresión rusa ha mostrado el potencial de la Unión Europea cuando “actúa como un bloque unido”, toma decisiones difíciles, compartir responsabilidades y movilizar medios y recursos, una labor que deberá impulsar España durante su semestre de Presidencia del Consejo Europeo.
Así, el rey ha animado a avanzar en un proyecto de interacción europea que abarque el ámbito de la defensa y de la seguridad y ha subrayado que “una Europa fuerte en defensa refuerza a la Alianza Atlántica y viceversa”.
Don Felipe también ha señalado la importancia de que España aproveche su liderazgo en Europa para avanzar en la relación UE-América Latina y “afianzar los lazos y defender a nivel internacional los intereses que compartimos y los valores con los que estamos comprometidos” a uno y otro lado del Atlántico