Tarde festiva en toda España por la celebración del Día de la Constitución en la que muchos madrileños se han reunido con familiares y amigos para ver el encuentro de octavos de final entre Marruecos y España del Mundial de fútbol de Catar.
Unos han elegido hacerlo en casa, otros en bares y restaurantes. La emoción ha marcado una tarde que ha dado paso a la decepción en la tanda de penaltis.
Los nervios se han convertido en desencanto por la derrota sufrida por la selección que dirige Luis Enrique.