Se va a llamar Bus Rapid. Se aceleran las obras para poner a punto la lanzadera que va a unir los barrios del norte de Madrid y que el Ayuntamiento espera que esté listo en mayo. Tendrá un carril reservado y prioridad en los semáforos. Las obras van contrarreloj.
Cuando se inaugure esta línea, los problemas de tráfico en estos PAUS se va a multiplicar, según manifiestan muchos vecinos de Sanchinarro.
Pero la mayoría está deseando estrenar este autobús ecológico, con capacidad para 100 personas y rápido. Tardará poco más de media hora en hacer el recorrido entre el hospital Zendal y el Ramón y Cajal.
Las obras están finalizando, para inaugurar a finales de mayo la línea, y el Bus Rapid ya estará circulando por la capital a modo de prueba.
El Ayuntamiento de Madrid ha hecho una inversión de 23 millones de euros, para acometer las obras de los 31 kilómetros de recorrido y para la compra de los 10 autobuses que tendrá la nueva línea.