Sergio Conteras huyó clandestinamente de Venezuela tras pasar por el presidio militar de Ramo Verde. Lleva ocho meses en España, seis de ellos en un centro de acogida. Hoy ejerce como portavoz en España de Juan Guiadó, amigo personal y compañero de partido.
Sergio está convencido de que habrá una transición pacífica. La llave no la tiene Maduro, asegura, sino el ejército.
Al igual que su partido, Voluntad Popular, rechaza la autoridad de Maduro para convocar elecciones y está convencido de que ya no hay vuelta atrás.
Desde este modesto apartamento del norte de Madrid, Caracas también es una realidad de dolor y esperanza.