La Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de la Comunidad de Madrid acumula ya cinco décadas de historia.
De sus aulas han salido los profesionales que se encargan de curar y cuidar los tesoros y obras de arte de la Biblioteca Nacional, El Prado, el Thyssen o el Reina Sofía.
Su prestigio atrae a alumnos de toda España, ya que nace de su forma de enseñar: desde el minuto uno, los alumnos practican con obra real.
Pero también aprenden física, química, historia del arte, el uso de las nuevas tecnologías y los secretos de viejas técnicas.
Tras dos años de formación básica, los estudiantes se especializan, eligen entre pintura, escultura, arqueología o documento gráfico.
Otra de sus virtudes es que cada año solo entran 40 alumnos, 10 por clase. Y en el último curso tienen prácticas.
Para entrar no se necesita la Evau pero hay que pasar una prueba. Se imparte enseñanza pública y oficial de grado, igual que un titulo universitario y un master.