Y no sólo el calor es el protagonista este fin de semana. Vuelve la calima. En marzo ya vivimos este episodio en el que se acumula en el aire polvo en suspensión procedente del desierto y que tiñe todo de color naranja.
Ojo porque puede afectar a la calidad del aire y que debe poner sobre todo en alerta a los pacientes con enfermedades pulmonares crónicas. Los expertos recomiendan a las personas más vulnerables, aunque sea por unas horas, llevar la mascarilla puesta si se sale a la calle.