Los parquímetros del distrito madrileño de Ciudad Lineal que comenzaron a funcionar el pasado lunes, han puesto en pie de guerra a los vecinos.
Fueron los propios residentes del barrio de la Concepción los que solicitaron al Ayuntamiento su instalación debido a los graves problemas existentes en la zona para encontrar aparcamiento.
Sin embargo, los comerciantes y trabajadores de la zona están en total desacuerdo al no poder solicitar la tarjeta de residentes, que les permitiría aparcar en la zona de estacionamiento regulado (SER).
Algunos han optado por recurrir al uso del transporte público, mientras que otros no han tenido más remedio que alquilar plazas de garaje en el barrio, llegando a pagar al mes hasta 450 euros mensuales.