La Sierra Oeste de Madrid se vuelca con el enoturismo, una de las actividades con más proyección del sector turístico mundial, que estos días se da cita en la capital con motivo de Fitur.
Historia, tradición, un entorno natural privilegiado y, por supuesto, el apreciado vino, son los ingredientes principales de estas experiencias turísticas cuya demanda no para de crecer.
La demanda crece también en nuestra Comunidad, que ha visto como su etiqueta Vinos de Madrid ha crecido en volumen y prestigio durante los últimos años.
Visitamos una bodega emblemática de Cadalso de los Vidrios. Aquí se elabora el vino, pero también se enseña. Los visitantes tienen la oportunidad de conocer todo el proceso de elaboración y de comprobar el resultado de cada añada en las catas.
La garnacha es la variedad más abundante en la zona de Cadalso, que cuenta con cinco bodegas cuya supervivencia depende en gran parte del enoturismo.
La experiencia se completa con paseos por la naturaleza, a pie, a caballo o en bicicleta, recorriendo viñedos o robledales de la Sierra Oeste.