Es una cifra escalofriante pero es real: cada 23 segundos fallece una persona en todo el mundo por un accidente de tráfico, que ocasiona 1,35 millones de víctimas mortales al año y es la principal causa de muerte de niños y jóvenes de 15 a 29 años. La carga recae de forma desproporcionada sobre peatones, ciclistas y motociclistas, en particular los que viven en países de ingresos bajos y medianos, donde mueren el 90% de las víctimas.
Así lo asegura Naciones Unidas con motivo del Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de los Accidentes de Tráfico, que se celebra este año bajo el lema 'Recuerda. Apoya. Actúa'. En España la cifra de fallecidos ha disminuido más de la mitad en 2020 debido a las limitaciones de movilidad por la pandemia de covid-19. Si en 2019 fallecieron 1.755 personas en las carreteras, en lo que llevamos de año el número de muertos se sitúa en 800.
Europa, la región más segura
Según los informes de la OMS, España es el undécimo país del mundo más seguro en materia de seguridad vial, al registrar una tasa anual de 4,1 víctimas mortales por cada 100.000 habitantes. En Europa, somos los sextos. Con una media de 51 muertes en carretera por cada millón de habitantes, Europa continúa siendo, con mucho, la región más segura del mundo en materia de seguridad vial.
A pesar de la mejora de las cifras, los accidentes de tráfico siguen segando vidas. Es el caso de Gema, que hace más de 20 años sufrió un gravísimo accidente que le causó secuelas que todavía la persiguen. "En España sale muy barato matar o herir con el coche", ha dicho.