El centro niega todos los hechos y asegura que se trata de un conjunto de mentiras y denuncias falsas. Los padres aportaron unas grabaciones donde los profesionales inmovilizaban y amenazaban al niño.
En los audios grabados se puede oír a algunos trabajadores del centro proferir insultos a un menor con autismo. El centro dice que los audios que originaron la denuncia están manipulados y sacados de contexto.
Las trabajadoras le amenazaban con tirarle agua por encima o pincharle en el culo. La directora del centro dice que el trabajo de todas las docentes es impecable y que quieren mucho a los niños. Educación constata ante el juez que el centro no tiene protocolos para niños con autismo. Según se escucha en la grabación, se burlan del pequeño, con autismo, porque repetía las palabras. Lo castigaban solo en el pasillo, a pesar de su tendencia a escaparse, algo que los profesionales conocían. La Consejería de Educación indica que se ha puesto a disposición del juez para ofrecer toda la colaboración
Hablamos con Irene, madre de un niño con autismo que también ha denunciado malos tratos en el colegio