La Comisión Europea pidió este martes rebajar a los 45 años la edad necesaria para someterse a una prueba diagnóstica de cáncer de mama y que las mujeres entre 30 y 65 años se hagan test cada cinco para detectar un posible cáncer cervical.
Bruselas presentó hoy una serie de recomendaciones a los países de la UE para que tengan en cuenta los avances científicos en la detección del cáncer, entre las que también se incluye la petición para que a las personas entre 50 y 74 años se les hagan pruebas inmunoquímicas fecales para determinar un posible cáncer colorectal.
El Ejecutivo comunitario pretende alcanzar así su objetivo de que, en 2025, el 90 % de las personas que pueden desarrollar estos tres tipos de cánceres se puedan someter a pruebas diagnósticas.
La Comisión también aconsejó realizar pruebas a los fumadores habituales para detectar un hipotético cáncer de pulmón y a todas aquellas personas entre 50 y 74 años que han dejado el tabaco.
Asimismo, para identificar el cáncer de próstata, pidió que se haga la prueba del antígeno prostático específico a los hombres de hasta 70 años de edad.
La comisaria de Sanidad, Stella Kyriakides, recordó que a 1,3 millones de europeos aproximadamente se les detectó cáncer en 2020 y que, según las estimaciones actuales, la mitad de los ciudadanos de la UE desarrollará algún tipo de cáncer a lo largo de su vida.
Según Kyriakides, las recomendaciones de hoy cubren el 55% de los nuevos tipos de tumores que se detectan cada año en la UE.
"Detectar antes el cáncer puede marcar la diferencia, aumentando las opciones de tratamiento y salvando vidas", dijo el vicepresidente de la Comisión Europea para el Estilo de Vida Europeo, Margaritis Schinas.
Combatir el cáncer es una de las prioridades que se ha marcado la presidenta de la Comisión, Úrsula von der Leyen, para su mandato.