La empresa Worldcoin ha asegurado que toda la información que se recopila en sus sistemas de captación del iris es anónima y que los usuarios mantienen el control en todo momento sobre los datos.
Responsables de la compañía, que está siendo investigada por la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), han comparecido este viernes ante un grupo de periodistas y han defendido que la iniciativa se ajusta a todas las normas europeas y españolas de protección de datos.
Las actividades de Worldcoin, impulsada por Sam Altman (OpenAI) están siendo investigadas por varios organismos europeos, entre ellos las autoridades alemanas de supervisión financiera BaFin o por la Agencia Española de Protección de Datos.
Ricardo Macieira, director para Europa de la empresa Tools for Humanity -que ha desarrollado parte de la tecnología que está utilizando Worldcoin-, ha explicado que los datos recopilados en el proceso quedan encriptados y almacenados de una forma anónima.
Además ha añadido que la imagen que se toma del iris se borra de forma instantánea para transformarse en un código encriptado y en ningún dato permanece asociado a documentos de identidad, correos electrónicos o teléfonos.
El control está "siempre" en manos de la persona que ha participado y la empresa "no paga" a le paga por la cesión de sus datos, sino que entrega un "token" que el usuario puede monetizar o almacenar, ha asegurado Maceira.
La empresa Worldcoin aspira a convertirse en una "red financiera y de identidad" mundial, y Ricardo Macieira ha insistido hoy en que la compañía "no quiere saber quién es cada usuario" sino tener la garantía de que cada uno de ellos es un "humano único" y diferenciar los contenidos o actividades en línea que genera una persona de los que genera la inteligencia artificial.
Para descargar la aplicación y pertenecer a esa "red" no es necesario dar el nombre, el correo ni el teléfono, y toda la información que se utiliza para asegurar esa "singularidad humana" se borra por defecto, han asegurado sus responsables, que han insistido en que la única información que se conserva es un mensaje que contiene un código de iris (no la imagen del iris) que garantiza esa "unicidad" pero que no está vinculado a una cuenta en la aplicación ni incluye información sobre una persona o su identidad.
La empresa ha creado su propia criptomoneda o "token" (llamado "WLD"), que reciben los usuarios al registrarse, ha asegurado Ricardo Macieira, quien ha recalcado en que al sistema sólo pueden acceder mayores de 18 años y en que los datos nunca se van a ceder ni a vender a terceros.