La semana pasada hablábamos con Joan Fons, el enfermero que se ha convertido en la primera 'cobaya humana' española en probar la vacuna contra el coronavirus que buscan contra reloj los más prestigiosos científicos de Oxford.
"Quería una paella y una sangría pero me he tenido que conformar con un fish and chips", contaba Joan a su cámara, justo antes de entrar en el hospital para comenzar el estudio.
Tres días despúes de haber sido inoculado, Joan volvía al trabajo y grababa nuevamente un video con su móvil: "estoy vivito y coleando", decía el enfermero.
Una semana después, Joan sigue "perfecto" y hemos podido hablar con él de nuevo para que nos cuente de primera mano cómo está siendo este momento crítico en su vida.
"De momento, ninguna de las 10.000 personas que forman parte del estudio hemos tenido efectos secundarios, pero tampoco sabemos si nos han puesto placebo o vacuna", explica Joan.
¿Y ahora qué?
El proceso de estudio de la vacuna durará 12 meses. "Cada semana tengo que hacerme el test del coronavirus, y cada mes un chequeo y análisis de sangre, así durante un año".
Joan confiesa que tuvo sus momentos de duda pero que lo volvería a hacer. A pesar de que está "desesperado por ir a España a ver a mis padres", este valiente enfermero nos manda con mensaje optimista: "Tengo muchas esperanzas de que podamos celebrar las Navidades con una vacuna".