Juanjo, arquitecto técnico de profesión, empezó a engordar, hace cinco años, cuando perdió su trabajo de jefe de obra y al poco tiempo su marido lo abandonó.
Todavía no ha superado la ruptura del todo: “No he vuelto a estar con ningún hombre. No me gusta que me toquen, el contacto físico.” Aunque confiesa que tiene la necesidad de volver abrazar y tener intimidad con alguien.
Desde su separación ha vuelto a vivir con sus padres y ahora trabaja de actor de teatro los fines de semana. “En el escenario me transformo, es el momento que tengo para no ser yo.”
Juanjo sufre de apnea del sueño y sabe que su alimentación es desordenada y no muy buena. “ Yo me veo gordo, lo asumo y sé que tengo que hacer algo para perder peso.”
El motivo principal de Juanjo para entrar en la Báscula y adelgazar, a parte de por salud, es coger la confianza perdida y volver a encontrar el amor.