La Comisión de Salud Pública ha dado luz verde este martes a la nueva estrategia que normalizará la covid a partir del próximo 28 de marzo, cuando se eliminarán los aislamientos de las personas asintomáticas y dejarán de hacerse pruebas con carácter general.
Así lo han decidido finalmente los directores generales de Salud Pública del Ministerio de Sanidad y de las comunidades en una reunión en la que han establecido que a partir de esa fecha las pruebas diagnósticas se centrarán en personas (mayores de 60, inmunodeprimidos y embarazadas) y ámbitos vulnerables (sanitarios y sociosanitarios), así como casos graves, en los que se focalizará a partir de ahora la vigilancia.
La nueva estrategia de seguimiento y control entrara en vigor el próximo lunes siempre y cuando los indicadores de utilización de servicios asistenciales se encuentren en nivel de riesgo bajo, han informado a Efe fuentes de este órgano.
La Comisión de Salud Pública, en la que están representadas las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad, ha aprobado este martes la actualización de la Estrategia de Vigilancia y Control frente a la Covid-19 tras la fase aguda de la pandemia, que será efectiva a partir del próximo lunes y se aplicará siempre que los indicadores de utilización de servicios asistenciales "se encuentren en nivel bajo".
Salud Pública justifica que los cambios que han acordado se fundamentan en que "los altos niveles de inmunidad alcanzados en la población española han determinado un cambio en la epidemiología de la Covid-19 que apoya la transición hacia una estrategia diferente que vigile y dirija las actuaciones a personas y ámbitos de mayor vulnerabilidad y monitorice los casos de Covid-19 graves, y en ámbitos y personas vulnerables".
La vigilancia en esta fase de transición dará paso a un sistema consolidado de vigilancia de las infecciones respiratorias agudas que deberá conformar los sistemas de vigilancia centinela de las enfermedades respiratorias agudas (IRAs).
En relación al control de la Covid-19 en la población general, los casos confirmados leves y asintomáticos no realizarán aislamiento y los contactos estrechos no realizarán cuarentena. En este sentido, se emitirán recomendaciones dirigidas a las medidas preventivas como la utilización de mascarilla en todos los ámbitos y evitar contacto con personas vulnerables.
En los ámbitos vulnerables, como centros sanitarios asistenciales o sociosanitarios, "se podrán implementar medidas específicas de aislamiento y control", aunque Sanidad no da más detalles al respecto.
Estas modificaciones se han comunicado y valorado conjuntamente con el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) y "se han establecido los mecanismos para garantizar la coordinación con la vigilancia a nivel europeo y la correcta inclusión de la información generada en España en los informes y documentos de seguimiento de la pandemia en la Unión Europea".
Asimismo, Sanidad recuerda que las estructuras extraordinarias de vigilancia y control puestas en marcha durante la pandemia "se mantendrán operativas para monitorizar indicadores clave que permitan detectar precozmente cambios en la situación que puedan requerir reimplantar medidas de control".
"Esta estrategia seguirá en vigor mientras no se produzca un cambio significativo en la tendencia que indique una circulación no controlada del SARS-CoV-2 o bien un cambio en la situación epidemiológica que requiera restablecer medidas de vigilancia y control a propuesta de la Ponencia de Alertas y Planes de Preparación y Respuesta", remacha el Ministerio a través de un comunicado.