En apenas tres días, el Rayo Vallecano ha pasado de la euforia copera por la ilusión de acceder a la final de la Copa del Rey a la cruda realidad de la permanencia en LaLiga, competición en el que encadena ocho partidos sin ganar.
El Rayo Vallecano se encuentra en un bache de resultados que se está prolongando desde el parón navideño. De los ocho partidos ligueros disputados este 2022 solo ha sumado un punto de veinticuatro posibles y no gana desde hace dos meses y medio, desde el 18 de diciembre de 2021 frente al Alavés.
En este tiempo, el equipo encadena siete derrotas -las últimas seis seguidas- y solo un empate, un pobre balance que le ha hecho pasar en solo dos meses de vivir cómodamente mirando más hacía arriba a empezar a mirar con preocupación hacía abajo.
"Estamos en la pelea por la permanencia". Así de tajante se mostró Andoni Iraola al término del último partido de Liga frente al Cádiz, un rival directo por la salvación con el que perdieron 2-0.
Con 31 puntos en la clasificación el Rayo es decimotercero, siete por encima del descenso que precisamente ahora marca el Cádiz.
Uno de los aspectos que más preocupa al equipo es la falta de gol que está demostrando. En los ocho partidos de Liga de este 2022 solo ha marcado dos tantos y ambos han sido de Iván Balliú y Fran García, los dos laterales titulares.
La baja del colombiano Radamel Falcao, lastrado por las lesiones y la poca continuidad de juego, está dejando como única referencia en el ataque a Sergi Guardiola, puesto que el francés Randy Nteka apenas está gozando de oportunidades desde el inicio y las últimas veces que lo ha hecho ha sido más como mediapunta que delantero.
"Estamos con falta de efectividad y eso nos mata. El dato importante es que tenemos oportunidades, pero no las metemos. Al principio de temporada nos entraban las que teníamos y ahora nos cuesta más y así no podemos ganar. La situación es para preocuparse", dijo Álvaro, tras el partido frente al Cádiz.
En estos dos meses del nuevo año la única alegría del Rayo ha sido en la Copa del Rey, competición en la que han hecho historia y de la que cayeron eliminados con crueldad a un paso de la final en la última jugada del partido de vuelta de semifinales frente al Betis.
El Rayo necesita una reacción inmediata para no meterse en problemas y los dos próximos partidos en casa son claves ante Sevilla y Atlético de Madrid. La magnitud de los dos rivales, en zona de Liga de Campeones, no invita al optimismo, aunque el equipo que dirige Andoni Iraola se quiere aferrar a la imagen dada ante Real Madrid, Betis o Barcelona para resurgir y dejar atrás el bache.