Fede Valverde atraviesa un mal momento deportivo que él mismo atribuyó a lo mucho que le afectó quedar eliminado con su país a las primeras de cambio en el reciente Mundial, pero este miércoles pudo celebrar, por primera vez desde el pasado 2 de noviembre, un gol con la camiseta del Real Madrid que le permite afrontar de otra forma el segundo tramo de temporada.
"Después de tantos partidos, fue cuando me sentí más cómodo", reconoció el centrocampista tras la victoria de su equipo en el Mundial de Clubes por 1-4 contra el Al Ahly, en la que anotó el segundo gol. Fue un tanto en el que mostró una frialdad que le faltaba tras el parón del Mundial: recortó dentro del área y definió con pausa.
"Me afectó el Mundial. Cuando uno va a por un objetivo, tiene tanta ilusión y optimismo de que todo va a ir bien con su país, va con el sueño de un niño representando a millones de personas para intentar llegar lo más lejos posible. Y no poder hacerlo da tristeza. Todo lo que trabajamos parece que no sirvió de nada y duele", comentó antes de la semifinal.
Volvió de Catar impreciso, sin la garra ni la exuberancia física que le caracterizaban, y su rendimiento sufrió un bajón considerable, aunque Carlo Ancelotti le mantuvo la confianza.
El problema se plasmó en la Supercopa de España, cuando su pareja, Mina Bonino, compartió un mensaje en redes sociales en el que desveló que vivían "meses difíciles" e incluso catalogó la semana del torneo como "una de las más difíciles" que les había tocado pasar.
La causa no desvelada de ese mal momento se sumó a la decepción del Mundial y afectó a un Fede Valverde que busca ahora en el Mundial de Clubes, torneo en el que ganó su primer trofeo con la camiseta del Real
"Siempre hay baches y hay que seguir con la misma actitud para volver a seguir siendo importante en el Real Madrid, ser capitán como siempre quise y, poco a poco, volver a mi rendimiento bueno", comentó.
De momento, ha conseguido el primer paso: volver a marcar. Fede respira, y Ancelotti también. El italiano le puso el reto de que debía llegar a los diez goles o, en caso contrario, él se retiraba como entrenador.
Estancado en ocho dianas desde el 2 de noviembre, contra el Al Ahly sumó la novena y tiene tiempo por delante para que Carletto no vea peligrar su licencia de técnico.