¿Jugar al baloncesto en el Sáhara? ¿En una cancha duradera y respetuosa con el medio ambiente? Nada es imposible, a la vista del proyecto solidario que se ha propuesto la firma de calzado Mmartinyca, que cuenta con la colaboración de la marca de neumáticos Bridgestone.
Mmartinyca elabora las tradicionales menorquinas con neumáticos reciclados en la suela, y por cada par vendido, Bridgestone dona una rueda para el reciclaje y fabricación de pistas de baloncesto en los campos de refugiados saharauis de Mauritania, Marruecos y Mali.
Sin duda, un proyecto que combina el ocio, la formación y la integración de los niños que viven en los campamentos, junto con la reducción del impacto medioambiental que generan la fabricación y la gestión de neumáticos usados.