Una de las incógnitas que planean sobre las elecciones del 23J radica en los posibles problemas que pudiera haber a primera hora de la mañana en la composición de las mesas electorales. La coincidencia con las vacaciones ha desatado cierta preocupación.
Medio millón de ciudadanos, entre titulares y suplentes, están llamados a acudir a los 8:00 de la mañana a los colegios electorales para su constitución. La cita es para el presidente y los dos vocales elegidos, pero también para los suplentes (dos por puesto), que tienen que acudir al colegio electoral por si fallan los titulares, lo que supone una movilización en total de 542.826 personas en todo el país.
De ellos, más de 180.000 se encargarán de atender las 60.314 mesas electorales repartidas por toda España. Una labor por la que cada uno de ellos cobrará 70 euros en concepto de dieta, la misma cantidad que en los comicios locales del pasado 28 de mayo.
La presentación de alegaciones se ha disparado un 76% con respecto a las elecciones de mayo. En total, 32.000 alegaciones. Las juntas electorales de zona han admitido 23.000 de esos recursos. Y eso, que sólo un 20% de los solicitantes de estas alegaciones tenían ya contratadas unas vacaciones antes de recibir que les había tocado.
Las mesas no se constituyen sin tener cubiertos los tres puestos (presidente y dos vocales) y, si no se han presentado los designados, la Junta Electoral puede obligar a los primeros votantes que se acerquen a formar parte de la misma.
Una vez constituidas las mesas, a las nueve de la mañana se abrirán los colegios electorales, donde se podrá votar hasta las 20.00 horas. En cada mesa este domingo habrá dos urnas, una para votar al Congreso y otra para el Senado.