Dirigentes históricos del PSOE firmaron esta semana un manifiesto contra la Ley de Memoria Democrática que impulsa el Gobierno de Pedro Sánchez.
El manifiesto está rubricado, entre otros, por los expresidentes del Senado Juan José Laborda y Javier Rojo o el exministro de Sanidad y Defensa Julián García Vargas.
El texto nace con el rechazo de la derecha, de buena parte de las víctimas del franquismo y de políticos de la Transición.
Además, la crítica ahonda en el apoyo que la formación Bildu dará previsiblemente a la norma, algo que no le "suena bien" al expresidente Felipe González, ya que se reconocería a quienes sufrieron torturas o fueron víctimas dentro de la 'guerra sucia' de los GAL, surgida en el mandato de González.
Los encuestados por Telemadrid rechazan mayoritariamente (84,36%) la participación de la formación vasca en la formulación de la nueva ley que se aprobará este jueves.