La Reina ha inaugurado en el Museo de Santa Cruz la mayor exposición organizada nunca sobre el Greco, en la que se ha detenido, en particular, en los iconos griegos de Dómenicos Theotocópuli y, al marcharse, ha afirmado que le ha gustado "mucho" la muestra y ha invitado a visitarla.
Acompañada por numerosas autoridades e invitados al acto, doña Sofía ha recorrido la exposición durante casi una hora y ha recibido explicaciones del comisario, Fernando Marías. Al salir del Museo, la Reina ha respondido a preguntas de los periodistas sobre si le había gustado la exposición: "Mucho, hay que verlo", ha indicado.
El griego de Toledo es la gran exposición del año en que se conmemora el cuarto centenario de la muerte del Greco y está abierta en el Museo de Santa Cruz y en otros cinco edificios que muestran la obra concebida para ellos: la sacristía de la Catedral, la iglesia y la sacristía del Hospital Tavera, la iglesia de Santo Tomé, el convento de Santo Domingo el Antiguo y la capilla de San José.
La Reina se ha detenido en las cinco obras llegadas de Grecia, en particular La Dormición de la Virgen, un icono de la iglesia de la Koimésis de Syros muy popular y que, precisamente, no permanecerá en Toledo hasta que finalice la exposición el 14 de junio, ya que regresará a finales de abril para poder participar en la Pascua griega.
De hecho, la Reina ha querido sacarse una fotografía, a título privado, delante de la Dormición, acompañada por el metropolitano de la isla de Syros, Dorotheos II, y otros popes que han viajado a Toledo.
Doña Sofía, que ha conversado en griego con el obispo de Syros, ha recibido como regalo de sus paisanos una réplica de esta Dormición, además de otro presente del arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez.
También ha mostrado interés la Reina en el cuadro Santiago el Mayor, de peregrino, que forma parte de la colección permanente del Museo de Santa Cruz.
Fernando Marías ha admitido que a la Reina se la ha visto "muy a gusto" durante el recorrido por la exposición, además de haber tenido la oportunidad de hablar griego.
También ha asegurado que a Doña Sofía le gustaría volver a visitarla "de una forma más pausada", ante lo cual el académico se ha puesto a su disposición para ello.
Tras recorrer la exposición, se ha servido en el claustro del Museo un cóctel que incluía quesos de Castilla-La Mancha, alcachofas encurtidas a la griega, ventresca en aceite de oliva y asadillo, quiche vegetal, empanada de bacalao con pasas, mojete manchego, lomo de gamo asado, vino de Valdepeñas, pestiños y bizcocho de mazapán.
Antes de abandonar el edificio, la Reina se ha despedido de los trabajadores del Museo de Santa Cruz, que se lo han agradecido con un aplauso y un "¡viva la Reina!".
A la inauguración de la exposición también han asistido el ministro de Cultura, José Ignacio Wert; la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, y los presidentes de la Fundación El Greco 2014, Gregorio Marañón, y del Patronato del Museo del Prado, José Pedro Pérez-Llorca.
Asimismo, han acudido el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, el alcalde de Toledo, el delegado del Gobierno en la comunidad autónoma, el consejero de Educación y el presidente de la Diputación de Toledo.
También han recorrido El griego de Toledo la modelo Eugenia Silva, que es la vicepresidenta de la Junta de Protectores de la Real Fundación Toledo; la escultora Cristina Iglesias, que este Año Greco instalará tres proyectos en la ciudad de Toledo, y los embajadores de Gran Bretaña y Rusia.
Estos son dos de la decena de países que han prestado obras para esta gran exposición sobre el Greco, que aglutina en Toledo 125 de las alrededor de 300 pinturas del pintor que hay en todo el mundo.