H&M se enfrenta este lunes a la segunda jornada de huelga del personal de tienda convocada por CCOO y UGT después de que el pasado jueves, en el primer paro convocado, tuviera que cerrar el 95% de las tiendas del grupo en España.
De nuevo, más de 4.000 trabajadores de la compañía están llamados a parar en pleno comienzo de la temporada de rebajas, después de que hace varios días sólo pudieran abrir parcialmente seis tiendas de las más de 120 que tiene el grupo textil sueco en todo el país.
UGT calificó la jornada de huelga como “éxito rotundo y absoluto” y subrayó que la movilización demuestra “la necesidad de que la empresa escuche a la plantilla, y por ende las propuestas de los sindicatos mayoritarios”. “Seguiremos abiertos a la interlocución, en aras a conseguir mejorar las tan ansiadas mejoras en las condiciones laborales, de las personas que trabajan en la compañía”, apuntó el sindicato.
Las movilizaciones se iniciaron el martes de la semana pasada con unos paros parciales que provocaron el cierre de hasta 100 tiendas y un seguimiento medio del 80%, según los sindicatos. Este viernes, los sindicatos anunciaron dos nuevas jornadas de huelga para los días 1 y 8 de julio.
Según UGT, la semana pasada no fue posible llegar a un acuerdo con la empresa tras casi 12 horas de negociación al no concretar sus propuestas respecto a cuestiones como la implantación de un sistema de incentivos y la intención de modificar el complemento de incapacidad temporal. Además, la empresa les había propuesto ampliar las horas de contratación y la creación de un plus de responsabilidad, pero, en este caso, tampoco habían concretado.
Durante estos meses, los sindicatos venían incidiendo a la empresa en la “importancia” de sustituir a los trabajadores de baja, en excedencia o en otras situaciones que “en la práctica hace que en las tiendas haya muy poca plantilla, creando una sobrecarga de trabajo”.
Por su parte, desde H&M España, lamentaban la semana pasada que los sindicatos hubieran rechazado el paquete de medidas que incluía el incremento de los recursos efectivos en tienda “a través de ampliaciones definitivas de horas en contratos a tiempo parcial y más contrataciones” y hubieran decidido continuar con las movilizaciones convocadas.
La compañía confiaba en “poder siempre mantener un diálogo abierto y constructivo en beneficio de nuestros empleados”.