La economía española creció un 0,8% en el tercer trimestre, una décima menos que en el trimestre anterior, debido al estancamiento de las exportaciones, según la Contabilidad Nacional Trimestral publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en la que se confirman los datos avanzados a finales de octubre. La tasa interanual del PIB, por su parte, se mantuvo en el 3,1% en el tercer trimestre y ya acumula diez trimestres consecutivos creciendo a tasas del 3% o superiores.
Entre julio y septiembre, el consumo mantuvo el pulso y registró las mismas tasas trimestrales de crecimiento que en el segundo trimestre. Así, el consumo de los hogares repuntó un 0,7%; el gasto público avanzó un 0,4%, y el consumo de las instituciones sin fines de lucro registró un avance trimestral del 1%.
La inversión, por su parte, aceleró siete décimas su crecimiento trimestral, hasta el 1,3%, debido al fuerte repunte de la inversión en bienes de equipo, que pasó de un retroceso del 0,1% en el segundo trimestre a un avance del 2,5% en el tercero. En la construcción, en cambio, se moderó la inversión siete décimas, hasta el 0,3%.
En lo que respecta al sector exterior, las exportaciones no experimentaron crecimiento alguno en el tercer trimestre, frente al incremento del 0,1% que registraron en el trimestre anterior. Tampoco crecieron las importaciones, que venían de caer un 0,7% en el segundo trimestre.
Con el crecimiento trimestral del 0,8% registrado entre julio y septiembre se acumulan ya 16 trimestres consecutivos de avances del PIB. La tasa interanual, por su parte, acumula 15 trimestres en positivo, los últimos diez registrando valores iguales o superiores al 3%.
El INE ha explicado que la demanda nacional contribuyó con 2,7 puntos al crecimiento interanual del PIB, cuatro décimas más que en el trimestre anterior, mientras que la demanda externa aportó 0,4 puntos, cuatro décimas menos que en el segundo trimestre.
EL CONSUMO SE DESACELERA LIGERAMENTE EN TASA INTERANUAL
En términos interanuales, los dos principales componentes de la demanda nacional (consumo e inversión) mostraron un comportamiento desigual, aunque positivo. Mientras que el consumo desaceleró una décima su crecimiento respecto al trimestre anterior, hasta el 2%, la inversión lo aceleró hasta el 5,4%, tasa 1,6 puntos superior a la del trimestre anterior.
El empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, creció un 0,8% en tasa trimestral, una décima menos que en el trimestre anterior. En términos interanuales, la ocupación creció a una tasa del 2,9%, a un ritmo similar al del trimestre anterior, lo que supone la creación de 501.000 empleos a tiempo completo en un año.