El Tesoro Público espera colocar el próximo martes, 16 de agosto, entre 5.000 millones y 6.000 millones de euros en medio de las turbulencias que siguen azotando los mercados y que han sumado a Francia a la lista de los objetivos de los especuladores.
La subasta, la penúltima del mes de agosto, estará marcada por la decisión de la Autoridad Europea de Actos y Mercados (ESMA por sus siglas en inglés) de suspender durante 15 días las ventas de posiciones a corto en Francia, Italia, Bélgica y España.
La anterior subasta del Tesoro, celebrada el pasado 4 de agosto, se saldó con una emisión de bonos por 3.300 millones de euros, a los que se sumaron otros 800 millones en segunda vuelta, y logró un nivel de demanda que más que duplicó el importe adjudicado. Sin embargo, los tipos de interés, aunque se mantuvieron por debajo del 5%, se dispararon hasta su nivel más alto desde 2008.
La letras del Tesoro, al tratarse de deuda a corto plazo, cuentan de momento con unos tipos marginales más moderados, por debajo del 4%, ya que supone menos riesgo para los inversores.
En la última subasta de este papel, celebrada el pasado 19 de julio, el Tesoro Público colocó 4.448,43 millones de euros en letras a 12 y 18 meses, logrando así emitir el máximo previsto (hasta 4.500 millones de euros) en medio de una alta demanda (11.868,35 millones), aunque a tipos más elevados que en la anterior subasta, en un escenario en el que la prima de riesgo se mantiene por encima de los 350 puntos básicos.