Croacia se convertirá esta medianoche (22.00 GMT) en el Estado número 28 de la Unión Europea (UE), poco más de 20 años después de su independencia de la antigua Yugoslavia, con una celebración multitudinaria en el centro de Zagreb.
Banderas de la UE ondean desde hace varios días en la céntrica plaza de Ban Jelacic antes de las festividades de la noche, menos entusiasta que las de anteriores ingresos de países de Europa del Este debido a las preocupaciones económicas en un país en recesión desde 2009.
En esa plaza a partir de la tarde se sucederán conciertos de grupos musicales croatas en la celebración ciudadana, a la que se espera que asistan miles de personas.
En los festejos de Zagreb participan 680 artistas, mientras que otras ciudades croatas también han preparado sus propios programas, transmitidos en directo por las principales cadenas de televisión.
El presidente croata, Ivo Josipovic, y el primer ministro, Zoran Milanovic, recibirán a los 170 invitados internacionales en la sede del Gobierno y después les ofrecerán una cena de gala a las 18.00 horas (16.00 GMT) en el cercano Palacio Klovicevi.
Entre los asistentes están el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz.
Asistirán seis presidentes y ocho primeros ministros de la UE, ocho jefes de estado y cuatro líderes de Gobierno de los Balcanes, entre muchos otros altos responsables.
España estará representada por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.
El acto político central comenzará a las 23.00 horas (21.00 GMT) en la plaza de Ban Jelacic con los discursos de los máximos responsables de Croacia y la UE, y en la medianoche el nuevo socio comunitario marcará su ingreso con fuegos artificiales, repique de campanas y entonando el "Himno a la alegría" de Beethoven.
Croacia se une al bloque comunitario tras más de una década de negociaciones y poco más de 20 años después de declarar su independencia de Yugoslavia, detonante de cuatro años de guerra en las que murieron alrededor de 20.000 personas.
Eslovenia, también en un profunda crisis económica, fue la primera república ex yugoslava en unirse a la UE en 2004, un paso al que aspiran también otros territorios de la antigua federación, como Serbia, Bosnia, Macedonia, Montenegro y Kosovo.