Los principales esfuerzos militares rusos se centran ahora en preparar una ofensiva para establecer un control total sobre el territorio de las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk, en el este del país, y Mariúpol, en el sur, según el último parte del Alto Mando del Ejército ucraniano.
Este parte, emitido en el 42 día de la invasión rusa de Ucrania, indica que las tropas rusas continúan su ofensiva hacia Izium, una ciudad situada en el río Donetsk, en la provincia de Jarkov, así como hacia Sloviansk y Barvinkove, también en la misma provincia, que según los analistas son ciudades clave en la ofensiva rusa hacia Donetsk y Lugansk, las autoproclamadas repúblicas del este de Ucrania.
"En la dirección de Donetsk, el enemigo está tratando de mejorar la posición táctica de sus unidades y continúa realizando operaciones de asalto en algunas áreas", dice el parte.
El Alto Mando ucraniano se refiere también a la situación en la sitiada ciudad de Mariúpol, un puerto estratégico del sur a orillas del Mar de Azov fuertemente bombardeado y en el que viven sin servicios básicos, según Ucrania, más de 150.000 personas.
"Los intentos de asaltar Mariúpol no se detienen. Los defensores de la ciudad mantuvieron una heroica defensa durante más de cuarenta días, refrenando las abrumadoras fuerzas de los invasores rusos", dice el Alto Mando ucraniano.
El Ejército ruso anunció el martes la ofensiva final para la toma de la ciudad portuaria después de que venciera el plazo para que las fuerzas ucranianas depusieran las armas y abandonaran la urbe en dirección al territorio controlado por Kiev.
La batalla por Mariúpol continua
Los rusos continúan golpeando la ciudad de Mariúpol usando artillería y fuerza aérea y "las fuerzas ucranianas parecen estar sosteniendo una resistencia organizada en algunas partes de la ciudad", dice por su parte el último análisis del Instituto para el Estudio de la Guerra.
Según el análisis de este instituto estadounidense, las fuerzas rusas continuaron posicionándose para continuar su invasión en el este y sur de Ucrania, después de haber abandonado el ataque a Kiev y "redistribuyen algunas de las fuerzas de combate retiradas de Bielorrusia a Rusia".
"Pero es probable, según su análisis, que las unidades rusas que se retiraron de Kiev no recuperen la eficacia de combate durante algún tiempo", dicen.
"Las operaciones ofensivas rusas al sureste de Izium hacia Sloviansk continuaron en pequeña escala y lograron un progreso limitado. Rusia aún no ha intentado agrupar grandes concentraciones de fuerzas en este eje, sino que continúa enviando grupos tácticos de batallones individuales para avanzar por su cuenta", según el análisis de este instituto.