Dos policías heridos de bala en los disturbios raciales en Louisville
En las protestas por la exculpación de los tres agentes involucrados en la muerte a tiros de la joven afroamericana Breonna Taylor en Louisville
EFE
Al menos dos policías resultaron heridos de bala esta noche en las protestas por la exculpación de los tres agentes involucrados en la muerte a tiros de la joven afroamericana Breonna Taylor en Louisville (Kentucky).
El jefe interino de la Policía de Louisville, Robert Schroeder, confirmó esta noche que dos policías fueron tiroteados justo antes de que entrara en vigor el toque de queda en la ciudad, anunciado hoy para prevenir protestas y disturbios tras la presentación de cargos por la muerte en marzo de Taylor, que falleció a tiros en un registro de su apartamento.
Poco después de este anuncio el presidente estadounidense, Donald Trump, publicó un tuit en el que ofreció sus oraciones por la mejora de los dos agentes y la ayuda del gobierno federal para contener las protestas en la ciudad, que se han replicado en ciudades de todo el país.
"Rezo por los dos agentes que fueron tiroteados esta noche en Louisville, Kentuchy. El gobierno federal está listo para ayudar", aseguró Trump, quien añadió que ha hablado con el gobernador Andy Beshear. "Estamos listos para trabajar justo en cuanto se nos requiera", añadió el mandatario.
El fiscal general del estado de Kentuchy, Daniel Cameron, solo presentó hoy cargos menores contra uno de los tres agentes involucrados en la muerte de Taylor, que se ha convertido en todo un símbolo de las protestas contra el racismo y la brutalidad policial al igual que lo fue George Floyd tras su muerte en mayo en Mineápolis (Minesota).
La imputación de la Fiscalía acusa a uno de los agentes, Brett Hankison, de haber disparado contra un apartamento contiguo y en ningún caso por los hechos que condujeron a la muerte de la afroamericana de 26 años, que estaba en su cama cuando uno de las más de treinta balas disparadas por los agentes acabó con su vida.
Las protestas comenzaron nada más conocerse la decisión de la Fiscalía, que no persigue el caso como un asesinato o por haber sido resultado de un registro inapropiado, y después de anunciarse que el único de los tres imputados salió en libertad tras el pago de una fianza de 15.000 dólares y solo acusado de negligencia.
Los manifestantes tomaron las calles y prendieron pequeños fuegos en el centro de la ciudad, uno de los cuales afectó al palacio de Justicia del condado.
Sobre las 8.30 de la tarde, poco antes del inicio del toque de queda, dos policías fueron tiroteados y trasladados a un hospital donde han sido estabilizados y se encuentran fuera de peligro, aunque uno de los agentes precisó cirugía.
Según Schroeder, se detuvo a un sospechoso que está siendo interrogado. Varios vídeos en redes sociales muestran lo que podría ser el momento de los disparos contra una línea de agentes antidisturbios.
Las protestas por la exculpación de los agentes, que justifican su actuación por el hecho de que el novio de Taylor respondió a la intrusión, que se habría producido sin previo aviso, con disparos de un arma para la que tenía licencia.